Hematólogo en Monterrey
Si estas buscando un hematólogo, llegaste al lugar indicado. Nuestro equipo de ALTRUS, ubicados en la ciudad de Monterrey, cuenta con un equipo diseñado para el mejor cuidado de nuestros pacientes. Es por esto que contamos con hematólogos expertos en el tratamiento del cáncer de la sangre y de la linfa, sin dejar de lado afecciones como la anemia. Agenda tu cita con alguno de nuestros hematólogos por $1,200 MXN.
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La quimioterapia consiste en utilizar una combinación de fármacos que pueden destruir células con la finalidad de eliminar a las cancerosas. Aunque tiene la capacidad de erradicar el cáncer, también daña a las células saludables y crea efectos secundarios por considerar. La quimioterapia se aplica en ciclos de administración activa y de reposo. La vía de administración es mediante infusión intravenosa o tabletas orales.
La radioterapia utiliza altas dosis de radiación para destruir células cancerosas. Los rayos se suelen dirigir a una región del cuerpo que se vea particularmente afectada por el cáncer. El tratamiento puede durar varias semanas.
El trasplante de células madre reemplaza las células anormales de la médula ósea del paciente por células saludables indiferenciadas, evitando así su desarrollo canceroso. Las células utilizadas pueden provenir del paciente mismo si se cuenta con ellas o pueden ser donadas por otra persona.
La inmunoterapia utiliza agentes biológicos para estimular a tu propio sistema inmunitario a identificar y defenderse de manera más eficiente contra el cáncer.
La terapia dirigida actúa detectando señales asociadas a las células cancerosas que no están presentes en las saludables. Algunos ejemplos son:
– Anticuerpos monoclonales: anticuerpos artificiales que reconocen las células cancerosas.
– Inhibidores de crecimiento tumoral: detectan y bloquean el crecimiento del tumor.
– Inhibidores de tirosina quinasa: bloquea las señales que indican a las células cancerosas que deben multiplicarse.
El tratamiento de hierro intravenosos resulta superior que la terapia oral en eficacia, tolerancia y mejoría más rápida en cuanto a la calidad de vida. Existen varias indicaciones para su uso, teniendo entre ellas la intolerancia o el incumplimiento a la terapia vía oral, casos de malabsorción intestinal, anemias asociadas a tratamiento con quimioterapias, entre otros.
No es imperativo comenzar un tratamiento al ser diagnosticado. El monitoreo activo es recomendado para los tipos de cáncer de sangre y linfa que tienen un crecimiento muy lento y que no causan molestia, ya que la mayor parte de los tratamientos causan efectos secundarios molestos y podrían inducir la aceleración del cáncer.